"Un instante, un aspecto de la naturaleza lo contiene todo", dijo Claude Monet.

Nenúfares, plantas y los reflejos de los sauces en el agua. Una impresión artística del lugar del mundo más preciado para Monet, su jardín.

Azules claros, violetas profundos y verdes brillantes, sutiles armonías cromáticas que subrayan los efectos de la luz. Monet trasladó sus inquietudes artísticas por la luz a la serie de los nenúfares, con la idea de crear grandes lienzos que reflejaran la evolución de estas preciosas plantas en diferentes momentos del día y con el paso de las estaciones.

Con el mismo empeño e interés que Monet puso en su jardín, hemos creado este anillo como homenaje a la belleza de su mayor obra de arte.

Material: Plata de ley 925, bañado en oro de 18K
Peso: 5.2 gr.